l Rodrigo Ramos B.

A don Carmelo Miranda lo irán a buscar a las 19 horas, y son las 18.40 horas. Don Carmelo está sentado en la plaza de Toconao, con una copa de vino Ayllu a medio llenar. El vino Ayllu se produce en Toconao y tiene la característica de ser el más alto del mundo. El hombre de rostro seco, ojos pequeños como pasas y arrugas finas de libro sin abrir, dice que no le gusta la prensa pues siempre destaca lo malo. Luego del desahogo don Carmelo, uno de esos tesoros vivos, accede a hablar.

Don Carmelo es un cantor popular de San Pedro de Atacama, aunque es conocido en todos los pueblos de alrededor. Es número puesto en las actividades, en consecuencia llegó a la vendimia con su guitarras y sus ganas de aportar.

"Yo cantaba desde niño y lo hacía de distintas maneras. Mi canto era sobre la agricultura y a veces lo exponía en las actividades que se hacían en el pueblo. Luego comencé a participar en festivales. Ahora mis canciones se inspiran en la naturaleza o lo que veo en mi caminar".

El hombre dice que su edad debe contarse en sus años como artista. Dice, entre risas, que lleva seis años como artista, pero como cultor es toda la vida. Su veta, dice, es recuperar material y entregarlo, nunca pensó que se transformaría en artista. En medio de eso cantaba. La importancia, dice, se la dio la gente. "Ellos se interesaron por mi trabajo. Fue la gente la que me instó y llevó a transformarme en un artista. Me gusta lo que hago, lo disfruto", dice el hombre bajo la sombra de la torre blanca de la plaza de Toconao. El vino baja.

La transculturización de San Pedro de Atacama reconoce que ha afectado a la cultura originaria. "Algo se ha perdido con el turismo. Hay algunos que arriban dando ideas, haciendo aportes al pueblo. Hay otros que arriban y no tienen respeto por nada. Son los pocos -dice-, la mayoría se interesa y respeta a la cultura original. A mi lo que me preocupa es la suciedad en el ambiente y la droga que hay en el pueblo. "Yo tengo mi edad, y no le digo por mi, si no por el futuro de la gente. Si hubiese pensado en mi sería multimillonario, pero siempre he pensado en el resto, en mi gente".

"Yo no pienso en mi, pienso en la humanidad. Ya para pensar en la humanidad hay que pensar en el amor, para mi el amor es un caudal de energía. A través del amor se pueden hacer obras que perduren en el tiempo. Creo que el amor y la fraternidad nos puede salvar".

Son las 19 horas y a Don Carmelo lo van a buscar. Deja su copa vacía en la plaza de Toconao y camina en dirección al vehículo. J

"Sonidos del Desierto, Cantos Atacameño" es un proyecto Fondart de 2011 que reunió el trabajo de folcloristas atacameños. En ese trabajo se pueden escuchar los cantos tradicionales de Carmelo Miranda, Alejandro González, Germán Tejerina y Angélica Barbosa. Todos caben en la denominación de tesoros vivos.

Son cantos tradicionales que en su mayoría se han ido heredando.