Las claves para prevenir una intoxicación en Semana Santa
Recomiendan extremo cuidado en la preparación de productos extraídos del mar.
Dolor de cabeza, fiebre, dolor abdominal, náuseas y vómitos son los síntomas más frecuentes de una intoxicación producto del consumo de pescados y mariscos.
Un rito habitual en Semana Santa y para prevenir que las personas que siguen esta tradición se recomienda extremo cuidado y tomar medidas de precaución.
Por eso aquí entregamos ciertos consejos para prevenir una intoxicación en este fin de semana religioso:
Los mariscos deben cocerse por lo menos 5 minutos, ya que en un tiempo inferior hay más probabilidades que contraer una intoxicación.
Si lo cuece sobre los 5 minutos no tendría por qué manifestarse una intoxicación.
Hay que tener extremo cuidado con los lugares en donde se compran los pescados y mariscos.
La mantención de la cadena de frío es crucial, ya que su quiebre favorece la proliferación de algunos microorganismos que nos enferman y provoca intoxicación.
Antes de comenzar a cocinar los pescados y mariscos crudos, se aconseja lavar todos los utensilios antes de usarlos.
Si no consume todas las porciones, es necesario enfriar y refrigerar el restante. Considere a lo más 12 horas antes de consumir nuevamente estos mariscos.
Si manipula alimentos, lávese bien las manos y use guantes para protegerte y evitar que síntomas de una intoxicación.
Se recomienda consumir sólo alimentos extraídos del mar que sean de procedencia conocida y certificada por la autoridad sanitaria. J
l Lo que se debe tener en consideración es que los pescados son una importante fuente de proteínas de muy alta calidad y, a diferencia de la carne de vacuno, pollo o pavo, posee ácidos grasos omega 3 (EPA y DHA), ambos de vital importancia para la salud y desarrollo del ser humano.
El EPA cumple funciones de protección cardiovascular, se ha demostrado en un variados estudios que el consumo dos veces por semana de pescado graso (salmón, atún, jurel, sardinas) reduce los triglicéridos. Tiene propiedades antiaterogénicas, disminuye la presión arterial y, finalmente, disminuye el riesgo de mortalidad cardiovascular", señala Samuel Durán, nutricionista y académico .