La estudiante de psicología de la Universidad Católica del Norte e ilustradora autodidacta, es una apasionada por el arte y fue en octavo básico que se trasladó de Taltal a Antofagasta, cuando comenzó a explorar su talento rayando sus manos con bolígrafos de tinta.

Como todo artista necesita apoyo, su gran pedestal son sus padres quienes la alientan y le dan el fundamental soporte emocional. Pero también requiere de muchos lápices de buena calidad, que gracias a Pilot Chile. 'Ellos se han portado un siete conmigo, siempre me están mandando material y difunden mi trabajo, siempre muy buena disposición así que yo feliz por ello', expresó la joven.