Entre Antofagasta y Chañaral hay 380 kilómetros de la Ruta 5 norte, que cruza el Desierto de Atacama y que en su mayoría es un camino de tramos rectos y tediosos.

Estas características, señaló el mayor Héctor Rojas Castillo, comisario de la 1ª Comisaría de Taltal, sumado al calor del desierto y el sol puede provocar somnolencia a los conductores.

Por este motivo, y con el fin de evitar accidentes de tránsito en ese tramo, dicha unidad implementó los denominados "Oasis Preventivos" que se instalan en aquellas fechas donde aumenta el flujo vehicular como por ejemplo el pasado fin de semana largo.

Carabineros se instala a la altura del kilómetro 1.080 en las horas de mayor calor y ofrece a los conductores, acompañantes y familias un lugar con sombra. Incluso en este punto los conductores pueden hidratarse, descansar, estirar las piernas, distraerse y así poder continuar su viaje.

El dispositivo se aplicó por primera vez durante las vacaciones de verano de este año, principalmente los días de recambio de turistas y fue muy bien recibido por los conductores. De allí que se ha replicado cada fin de semana largo y en las últimas vacaciones de invierno.

La idea es mantener este servicio preventivo a futuro aquellos días donde aumente la circulación de vehículos y donde Carabineros, además de sacar a los conductores de la rutina del viaje, aprovechará de entregar recomendaciones para que el trayecto sea seguro tan como se ha hecho hasta ahora.

A disposición de los tribunales por el delito de robo frustrado quedó un sujeto, quien fue sorprendido al interior de un domicilio en el sector norte de Antofagasta.

El hecho quedó al descubierto en la madrugada del martes pasado cuando se constituyó en el lugar personal de la Subcomisaría Antofagasta Norte, luego que vecinos alertaron a la Central de Comunicaciones (Cenco) de Carabineros sobre la presencia de un individuo que se encontraba intentando ingresar al inmueble situado en el pasaje Cerro Ñielol.

Al constituirse en el lugar los efectivos policiales sorprendieron a un sujeto al interior del antejardín del inmueble, por lo que procedieron a su inmediata detención.

Por instrucción del fiscal de turno también concurrió hasta el Laboratorio de Criminalística (Labocar) de Carabineros, para realizar diversas diligencias periciales. A través de éstas últimas se logró establecer que el sujeto habría ingresado al domicilio forzando la chapa de seguridad de la puerta de la reja.

Además, se realizaron otras para establecer científicamente la participación del detenido en este hecho delictual.

Redacción - La Estrella de Antofagasta

La farmacia "Salud y vida" del sector Coviefi de Antofagasta fue clausurada por la seremi de Salud, Lila Vergara, en compañía de funcionarios de los departamentos de Profesiones Médicas y Farmacias y del área jurídica de la propia institución. Esto como una medida sanitaria de mayor severidad frente al incumplimiento de la orden de prohibición de funcionamiento que pesaba sobre el citado local, situado en Avenida Argentina 01975, y que había sido dispuesta a raíz de la falta de un químico farmacéutico.

La autoridad sanitaria explicó que todas las farmacias deben contar de manera permanente durante sus horas de atención con la presencia y apoyo de un químico farmacéutico. Ello resulta fundamental, puesto que el profesional en cuestión debe supervisar la dispensación de los fármacos que son vendidos al público. "El es el responsable de que la población adquiera productos conforme a su necesidad de salud, promoviendo el uso racional de éstos y evitando así los consiguientes riesgos sanitarios, disposiciones contenidas en el Decreto Supremo 466 de 1984", puntualizó.

Medidas

Agregó que la farmacia fue sorprendida en la referida falta a fines de junio y en el contexto del programa permanente de fiscalización del organismo, oportunidad en que se dictaminó la prohibición de su funcionamiento y ordenó el correspondiente sumario sanitario, restricción que debía mantenerse hasta que ésta contratara los servicios del profesional químico. Sin embargo, y sólo hace unos días, se constató que los dueños habían reabierto el local, continuando con las ventas y desobedeciendo así el mandato de la autoridad sanitaria.

Frente a estos hechos y en conformidad a las disposiciones del Código Sanitario, la Seremi de Salud procedió a su clausura, medida que implica que nadie puede ingresar al recinto, ni siquiera sus propietarios, hasta que presenten una solicitud formal a la propia Seremi de Salud, en la que aseguren y demuestren que la contratación del químico farmacéutico se realizó efectivamente.

Tanto la prohibición de funcionamiento como la clausura "no tienen sino el objetivo de proteger la salud de los usuarios, frente a los riesgos que implica el inadecuado consumo de medicamentos", precisó.