Redacción - La Estrella
Pasó el martes en la noche, en la población Raúl Silva Henríquez: la señora Elena Silva estaba atendiendo su negocio cuando llegan dos tipos sospechosos, uno de ellos tapándose la cara con la capucha. Los sujetos pidieron una caja de cigarros y comenzaron a intimidar para asaltarla, pero ella les dijo que habían cámaras grabando lo que hacían. Intimidados, los tipos arrancaron con los puros cigarros.
Aunque por suerte en esa ocasión no pasó nada, los vecinos dicen que en el último tiempo la delincuencia se ha acrecentado en el sector. "Nosotros estamos siendo afectados todos los días, implementamos un sistema de cámaras, pero como no hay directiva no podemos postular a los proyectos", reflexiona Ana Aras, dueña del negocio asaltado el martes. "Todos los días se duerme mal, porque hay que estar pendiente de las cámaras o del whatsapp. Esto se viene ahora como todo este año, pero en los últimos dos meses se ha acrecentado la delincuencia", asegura.
Los vecinos están tomando medidas ante los asaltos, dice doña Ana. Algunos andan con silbatos, otros con un bate, cualquier cosa que sirva para amedrentar a los maleantes. Héctor Rodríguez, presidente del Centro Comunitario "La Última Salitrera", menciona que hace poco dejaron desvalijada la casa de una vecina que había salido a la calle. "Le robaron hasta los dulces de Halloween", dice.
"En el sector estamos cerca de las faldas de un cerro, donde pernoctan muchachos drogándose y alcoholizándose", cuenta el vecino de la población que colinda con la avenida Arturo Pérez Canto. Para tomar medidas, ya han estado en contacto con la Subcomisaría Norte de Carabineros, y esperan pronto concretar una reunión con esa institución y la Policía de Investigaciones, donde se plantee el problema que sufren los vecinos. "Hemos tenido la colaboración de Carabineros y del capitán Andrade que ha puesto la disposición, pero queremos ver qué dice el Gobierno Regional y el gobierno comunal al respecto para saber cómo va a atacar este flagelo", dice Rodríguez. La idea, es que pronto los vecinos del sector norte de Antofagasta vuelvan pronto a dormir tranquilos sin necesidad de estar pendientes que la delincuencia atente contra ellos.
Una reunión esperan concretar los vecinos de la población con las policías para conversar el tema.