las horas de nerviosismo tras la alerta de tsunami
Las sirenas comenzaron a sonar a las 11:41
Alertando de la posibilidad de tsunami en el sur del país. Nueve minutos más tarde se activaron tres boyas para monitorear la llegada de las olas.
Alertando de la posibilidad de tsunami en el sur del país. Nueve minutos más tarde se activaron tres boyas para monitorear la llegada de las olas.
Jonás Romero Sánchez
Evacuaciones desde el sector costero, cortes en el suministro eléctrico y daños en carreteras, fueron algunas de las consecuencias que dejó el terremoto de magnitud 7,6 en la escala de Richter, que se percibió ayer en la Isla Grande Chiloé y otras zonas del sur.
En total fueron cinco regiones -desde el Bíobío hasta Aysén- las afectadas por el sismo navideño, que comenzó a las 11:22 y 23 segundos, de acuerdo al Centro Sismológico de la Universidad de Chile.
El epicentro se situó a 30 kilómetros de profundidad y a 67 kilómetros al noroeste de Melinka, en la XI Región. El movimiento telúrico no dejó víctimas fatales, pero sí daños materiales en Chiloé, donde se concentraron las evacuaciones a los cerros.
A 11 minutos de que comenzara el sismo, el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada de Chile (Shoa) decretó la alerta de tsunami para la Región de los Lagos, y estado de precaución para Bío Bío, La Araucanía, Los Ríos y Aysén.
De acuerdo a la Oficina Nacional de Emergencias (Onemi), cinco mil personas fueron evacuadas.
Algunos no esperaron la notificación oficial. René Vargas, pescador chilote de Queilen, contó a 24H que "cuando se acabó el temblor, todos arrancaron hacia el cerro. Pero para algunos no fue fácil, ya que en la zona todos trabajamos de la mar".
En Caleta La Barra, en la Araucanía, familias enteras fueron evacuadas gracias a un camión de bomberos. "Estábamos preparando el almuerzo en la playa, por las fiestas. Pero dejamos todo botado", contó uno de los habitantes, al mismo canal.
Poco antes de las 13.00, se levantó el estado de precaución en la VIII Región y, una hora más tarde, se hizo lo mismo en el resto de las regiones.
El ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, sostuvo que los principales daños ocurrieron en puentes y rutas Los Lagos. En Quellón se cayeron casas también.
El puente Tarahuín, de la Ruta 5, resultó cortado. Al respecto, Undurraga dijo que existe un "problema de conectividad entre Chonchi y Quellón por el puente, más otro conjunto de afectaciones que tiene la Ruta 5, en distintos lugares. Es por eso que se está trabajando en un bypass de manera de volver a conectar Quellón, el que demoraría 48 horas".
Mientras, el alcalde de Chonchi, Fernando Oyarzún, acusó fuertes daños en "una carretera nueva donde los estándares de calidad no funcionaron".
"El esfuerzo de los primeros días será para restablecer la conectividad y en los días siguientes (veremos) si hay responsabilidad en los daños o es en razón de fuerza mayor", agregó Undurraga.
Ricardo Toro, director de de la Onemi, sostuvo que los cortes de luz afectaron a 20.897 clientes.
Precisamente fue el corte de luz lo que mantuvo en vilo a los habitantes de la isla, quienes hicieron largas filas para comprar combustible. Enap anunció la llegada de buques con esta carga para enfrentar el tema.
El director del Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (Shoa), Patricio Carrasco, aseguró que no hubo error al cambiar las estimaciones de horas de llegada de las olas y luego descartar un tsunami. "He visto en algunos medios de que se habla de que el Shoa cometió un error, les pediría que cambiaran el término de error por reprocesamiento de información", dijo. Sostuvo que "posterior al sismo se recibió el primer boletín del Centro de Alerta de Estados Unidos, dando una magnitud de 7,5" y luego "recibimos información de nuestro centro sismológico nacional, informando de una magnitud 6,9", lo que dio origen a las variaciones en los cálculos.