Pamela Serey A.
Si Colo Colo gana el domingo y Universidad de Chile pierde, los albos bajarán la Copa número 32. Si no se dan esos resultados, todo se definirá en la última fecha.
Por lo mismo, el técnico Pablo Guede pidió paciencia. El entrenador de los albos imagina que el partido del domingo estará muy influido por la hinchada: "Si hace un gol O'Higgins, el estadio se viene abajo y pedirán ir por el gol. Pero los partidos duran 90 minutos. Por eso les digo, hay que tener paciencia".
Los albos se medirán con Antofagasta, el domingo, a las 15.00, en el Estadio Monumental y ya lo viven como una nueva final.
"Tengo la convicción de que el domingo hay que hacer un gran partido, para depender de nosotros", dijo el estratega: "Es un equipo complicado y muy peligroso al contragolpe".
Luego confidenció cuál es su sueño. Con una sonrisa, se refirió a la posibilidad de levantar la copa el domingo o que esa situación se aplace una semana más.
"Lo que sueño es salir campeón, me da lo mismo dónde. Yo quiero salir campeón", apuntó el entrenador, sobre una posible definición del Clausura en la última fecha.
También aseguró que por fin puede contar con la mayoría de sus jugadores. Esto, salvo los que tuvieron lesiones graves que los dejaron fuera del torneo. Esta vez, Esteban Paredes, Jaime Valdés y Pedro Morales están en condiciones de ser citados para el partido.
Hoy entrenará en la cancha principal del Estadio Monumental con sus pupilos y ahí definirá la alineación definitiva. En esta oportunidad, con más tranquilidad.
En la conferencia de prensa también hubo un minuto para recordar el festejo eufórico que realizó en el partido ante Everton. Guede, con romanticismo, recordó el momento: "grité un gol de forma sentimental y, si no lo grito, luego dicen que soy un pecho frío. El que es de Colo Colo y no gritó ese gol, tiene agua en las venas".
"Es que fue muy emocionante, por como se dio todo", agregó.
El acierto de Salazar
El entrenador de Colo Colo también evaluó como positiva la actuación del meta. Sin embargo, indicó que no habló con él después del partido, argumentando que "hizo bien su trabajo. Yo no tengo por qué felicitarlo, para eso están todos los hinchas".
En medio de esa conversación, volvió a salir el nombre de Paulo Garcés. Guede reconoció que muchas veces pensó en sacarlo y dejarlo fuera, por los errores que cometía en los partidos, pero aseguró que no era una decisión sencilla: "Traté de aguantar a Paulo, para ver si podía levantar su nivel, pero cuando vi que no era capaz, puse a Álvaro". El problema del DT es que no tiene más arqueros: "Si lo sacaba, me quedaba con un segundo arquero que tiene 15 o 16 años. No era fácil".
Por último, hubo un momento que generó risas en la conferencia. Un reportero le preguntó a Guede si le habían cortado el agua por las lluvias. "¿Pasa eso en Chile? Es que llevo recién un año viviendo en esta casa que estoy", respondió.
"Entonces los suministros en su casa están al día", arremetió el reportero. Ahí recién Guede entendió la broma y salió jugando: "Pregúntale a mi señora".