Claudia Cáceres G.

En 2008 Javier Castillo (29), actual egresado de Ingeniería Comercial de la Universidad Católica del Norte, se enteró de un accidente automovilístico en el que estuvo involucrada una universitaria de su misma casa de estudios. Al ver carteles en los que se apelaba a la voluntad de jóvenes para donar sangre, dado el estado de gravedad en el que se encontraba la mujer, Javier no lo pensó dos veces y fue a donar. "Tiene la edad de mi hermana", reflexionó en ese entonces.

Javier fue al Banco de Sangre del Hospital Regional de Antofagasta y realizó su donación; la primera de tantas otras que continuó haciendo en todo este tiempo y que lo llevaron el año pasado a ser reconocido por dicha institución por su notable compromiso.

Ayer, en el Día Mundial del Donante de Sangre, Javier nuevamente estaba listo para donar. Llegó a eso de las 11.30 horas al frontis de la Intendencia, en donde se estaba realizando una campaña regional para conmemorar el día. Allí fue recibido entre abrazos por el personal del Banco de Sangre y cómo no, si lo conocen hace más de ocho años.

"La primera vez que doné fue cuando una niña tuvo un accidente y necesitaban donantes. Nunca había donado y dije, 'bueno, no tengo nada que perder', entonces fui al Banco de Sangre y claro, me preguntaron si la conocía y les dije que no, la única razón por la cual lo hacía era porque la chica tenía la misma edad que mi hermana. Sentí algo de empatía y me quedó marcado porque cuando uno dona, a uno le dan un papel de certificación para que la persona cuando tenga la sangre no se la cobren, entonces fui donde la mamá de la paciente y me preguntó si era una amigo de ella y le dije que no, que no la conocía, me quedó mirando y me dijo '¿por qué lo hiciste?', estaba emocionada y sorprendida", cuenta.

Javier, mientras espera que lo llamen para tomar sus datos y comenzar el proceso de donación - uno que ya conoce de memoria - agrega que ese momento le quedó marcado para siempre "es una sensación de hacer algo que te enriquece".

Sangre

Según cifras del Ministerio de Salud, por cada 100 mil habitantes, sólo hay 14 donantes. En el caso de la Región de Antofagasta, los donantes de reposición, es decir, aquellos que se acercan al Banco de Sangre del Hospital Regional porque tienen un paciente enfermo, alcanzan un promedio de 70 personas a la semana.

Así lo confirma la médico jefe de dicha unidad, Natalia Valenzuela, quien ha estado desde temprano recibiendo a los antofagastinos que han llegado a participar de la campaña. "Estamos muy bajos porque necesitamos 130 donantes a la semana y tenemos cerca de 70. Semanalmente realizamos colectas y ahí es como nuestro fuerte porque hay entre 30 y 40 donantes voluntarios a la semana; eso nos ayuda a mantener".

La médico también menciona que el Día Mundial del Donante de Sangre es una actividad organizada por la Organización Mundial de la Salud, en la que participan los países que la integran. "Este año la temática es tener un grupo de voluntarios de manera permanente para mitigar en caso de catástrofe, no solo naturales sino que provocadas por el hombre, por ejemplo un choque, atropello, actos terroristas que gracias a Dios no suceden acá, pero en otros países sí, que hace que lleguen un montón de pacientes juntos y que requieren una transfusión de sangre. Entonces al tener un stock permanente de sangre y donantes voluntarios que nos provicionen podemos lograr una atención expedita y que no falte sangre".

Sobre el actuar de Javier, Natalia comenta que "me parece una muy buena actitud que habla del amor al prójimo porque como se pueden imaginar la sangre no se fabrica fuera de nuestro cuerpo, es el único tratamiento disponible para otras personas".

Dentro de este 'stock permanente' que hace alusión Natalia, estaría Javier ya que desde que empezó en 2008, ha donado en promedio 15 a 20 veces. "La mayoría ha sido voluntaria, no he tenido ningún caso que no haya sido por un favor de amigos o familiares, nada del otro mundo, pero sí he estado en varias campañas de donación del Banco de Sangre, son un amor, son un siete, me reciben con mucho cariño...todos me saludan cuando llego. Me gusta lo que hacen, admiro mucho a las personas que hacen las cosas por amor al arte, quiero ser o intentar ser una de ellas", menciona el joven.

En la espera, el ya casi experto donador recalca que se puede donar cada tres meses, "no tenemos nada que perder. Una persona en Chile hoy piensa '¿qué gano con eso?' '¿por qué lo haría?' Y yo les digo '¿por qué no?' El hecho de hacerlo y por una persona que no conoces en realidad te da una sensación de empoderamiento, de que puedes hacer algo por una persona sin esperar nada a cambio".

Dice que es bastante lo que he donado, cerca de 10 litros de sangre en el caso hipotético que haya donado cerca de 20 veces (no lo recuerda bien) porque por donación le extraen 450 ml de sangre, "es como una lata de bebida, no es tanto. Puedo donar mucho también porque soy O Positivo, es decir, un donante universal".

Erika Ossandón, otra de las antofagastinas que llegó a donar, también se suma a las palabras de Javier. "Lo hago recurrentemente, cada vez que puedo me arranco un ratito y dono. Tengo 45 años y lo hago desde hace siete, cada vez que hay una campaña procuro participar de ella. Siempre pienso que alguna vez me puede tocar a mi y espero que cuando me toque, haya sangre, esa es la importancia que yo le doy al tema de la donación. Espero que cuando se necesite estemos resguardados y tengamos para cubrir la necesidad de quien lo requiere".

Javier indica que varios amigos suyos le han dicho que han sabido de su caso y que se han inspirado en él para también poder hacerlo. Añade que fue súper emocionante cuando lo reconocieron el año pasado "porque cuando uno hace esto es porque quiere, uno no espera ser reconocido. Me gusta y me molesta al mismo tiempo que una persona tenga que ser reconocida porque no debería ser tan extraordinario esto, debería ser más seguido, que las personas se ayuden entre sí, si todos estamos en el mismo campo de batalla".

Donación

En plena campaña la seremi de Salud, Lila Vergara, también aprovechó de hacer un llamado a la ciudadanía para que colabore con quienes en algún momento podrían ayudarlo en caso de necesitar sangre. "Necesitamos que la gente done sangre, es muy necesario porque la cantidad de sangre que está en el Banco de Sangre siempre es insuficiente y un segundo que un paciente se demora en recibir una donación de sangre significa a veces el riesgo de la vida, por lo tanto el llamado es a solidarizar, hoy por ti, mañana por mi", comenta.

Quienes pueden donar sangre son las personas que tienen entre 18 y 60 años de edad, pesen más de 50 kilos; que no padezcan enfermedades transmisibles por sangre; no haberse realizado tatuajes o perforaciones en el último año; no haber tenido relaciones sexuales con parejas ocasionales ni consumir drogas endovenosas.

Antes de la donación se realiza una entrevista privada y confidencial para cuidar al donante y al receptor.

Si usted tiene dudas o busca derribar mitos de la donación, puede contactarse al 2656432 o escribir a al correo donantesdesangre.hra@gmail.com.