Michael Seguel P.
La llegada del Papa Francisco a Chile es un hecho. Así lo aseguró este martes el Nuncio Apostólico, Ivo Scapolo, en compañía de las principales autoridades eclesiásticas del país. Estará en Chile entre el 15 y el 18 de enero del próximo año y, en su recorrido, visitará Iquique, Temuco y Santiago. Luego viajará a Perú, donde estará hasta el 21 de enero.
"Esperamos la visita del Santo Padre con mucha confianza, con un corazón muy abierto (...). Será un mensaje que le hará muy bien a la Iglesia y a nuestro país", dijo el arzobispo de Santiago, cardenal Ricardo Ezzati.
El equipo a cargo de la visita estará integrado por el secretario general de la Conferencia Episcopal, Fernando Ramos y el periodista Javier Peralta, entre otros fieles.
Ésta será la primera visita de un Papa al país, luego de la realizada por Juan Pablo Segundo en 1987.
El regreso
Esta será la segunda visita del Papa a Sudamérica, luego de su paso por Bolivia, en 2015, donde realizó declaraciones que causaron controversia por la disputa abierta en La Haya con ese país.
"Estoy pensando en el mar. Diálogo. El diálogo es indispensable", dijo el Papa una vez finalizada su misa en la Catedral de La Paz. Al respecto, Fernando Ramos, dijo ayer que "no sabemos lo que va a decir. Nuestra postura siempre ha sido colaborar al encuentro de los pueblos y es la línea que también sigue el Papa".
La Presidenta Michelle Bachelet ayer destacó que, con su visita, "podremos colocar al ser humano y no al dinero en el centro para el desarrollo de una nación". Agregó que "nos habla de cómo enfrentamos los desafíos sociales y medioambientales de los que habla".
Chile es un país que Jorge Bergoglio conoció bien de joven. A fines de la década de 1950 vivió como seminarista en el actual centro de espiritualidad Loyola, en la comuna de Padre Hurtado, en la Región Metropolitana.