Andre Malebrán T.

De acuerdo a un estudio realizado por la Fundación País Digital en el que analiza el desempeño de los usuarios de la web en Chile, utilizando los datos proporcionada por la última Encuesta Casen (2015), la Región de Antofagasta es la que más "uso de internet" realiza en el país.

El 76,7% de quienes viven en la Región de Antofagasta utilizó dicho servicio (considerando cualquier formato de acceso a Internet, como fijo o móvil) en el periodo directamente anterior al momento de la consulta de la Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (tres meses antes).

Luego, la Región de Magallanes sigue con 75,1%; Tarapacá marcó 73,4%, la Metropolitana 72,3%; Arica y Parinacota con 71,7%, y Aysén con un 71,2%. Mientras que las más bajas fueron la de O'Higgins con 59%; la Región de la Araucanía un 54,3%; y en el final de la lista, del Maule con 52,3%.

Brechas

El mencionado estudio se basa en tres pilares que reflejan la interacción de diversos componentes del ecosistema digital: empresas, gobierno digital y usuarios.

A nivel país y en base a la Casen 2015, se encuentran resultados positivos en los crecimientos de uso de internet, tanto para los deciles económicos, la mejora en los niveles educacionales, la mayor penetración de internet en las personas con menores años de estudio, en zonas geográficas rurales o urbanas, y finalmente el impacto positivo en todas las edades.

De todas formas, la brecha persiste. Los rangos de edad adulta, desde los 30 a 50 años, presentaron los mejores crecimientos de conectividad. Sin embargo, los adultos mayores continúan con bajos niveles. Asimismo, los deciles 1 y 2, las personas con bajos años de estudio y de edad avanzada, como también las personas en zonas rurales, son las áreas que necesitan un mayor trabajo por parte de las autoridades y políticas correspondientes.

De acuerdo al estudio "Uso de Internet en Chile 2017: La otra brecha que nos divide", hay un margen de uso de internet influido, principalmente, por factores como los años de educación formal, la edad, el quintil económico, si la persona vive en zona urbana o rural y las conexiones de apoyo social. Estas variables explican, en más de un 90%, si una persona usa o no internet, siendo el factor educacional el que más ha aumentado como causal.

Realidad regional

La Segunda región fue la que mostró la menor brecha entre sus comunas, considerando la distancia entre la mejor posicionada, Antofagasta (con un 79,8%) y Taltal, la de menor uso regional (con un 50,9%).

"Es la menor diferencia por comunas a nivel nacional (con un 29%), y eso es también uno de los factores que explica que la región también tenga un gran uso", comenta a La Estrella el investigador del Centro de Estudios Digitales de Fundación País Digital, Ricardo León.

Catalogada como la región con mayor uso de Internet, la comparación entre la Casen 2013 y 2015 muestra que se produjo un crecimiento de un 7,7% regional, no siendo la variación más grande del país (explicado en que anteriormente también presentaba buenos números).

En cuanto a las diferentes comunas, León explica que la información que analiza la fundación no considera a Ollagüe, ya que la misma metodología de Casen no la toma en cuenta por el número de datos disponibles. Así que de las otras ocho, Antofagasta queda como primera mientras que Taltal baja un 5,4%. Todas las demás comunas (tal muestra el gráfico superior) presentan avances. En esta materia destaca indudablemente lo hecho por Mejillones, que de un 55,5% del año 2013 subió a un 74,6% en solo dos años, lo que representa un 19,1% de crecimiento.

En el ranking de las mejores 25 ciudades para el uso de Internet, sólo la capital regional y Calama dicen presente, posicionándose en los puestos 10 y 18 respectivamente. En primer lugar queda Vitacura y en el puesto 25 la comuna de Valparaíso.

En brecha socioeconómica, se pudo constatar que sí existe una distancia importante entre el primer (63%) y el último decil (90%), con un 27%. Lo bueno es que nuevamente la región es la que presenta menor diferencia entre estos sectores, teniendo en cuenta que la brecha nacional en este factor es de un 45%.

En cuanto al factor de si la persona vive en zona urbana o rural, el estudio demuestra que surge algo muy parecido a lo que acontece en el resto de Chile, marcando un 77% en la parte urbana y un 44% en las zonas rurales regionales, explicado por la regla de que si se está más cerca de polos urbanos grandes (centros regionales), hay mayor uso de Internet.

En edad la tendencia chilena es de dos factores claves: jóvenes usando este servicio y adultos mayores casi completamente desconectados. Y, adivine ¿cómo nos fue en esta materia? Acá otra vez los números son positivos, ya que el 30% de adultos mayores utiliza Internet (a nivel nacional es solo un 22%).

El resto de la población regional, es decir, descartando a los adultos mayores, alcanza un uso del 84%, siendo de las más altas en el país.

Sobre la brecha educacional, las personas que tienen un año de educación superior o más en la Región de Antofagasta tienen 93,5% de usuarios, lo cual es muy alto. Ahora, si catalogamos al resto de la población (educación media o menos), se calcula en un 69%, teniendo la mejor media a nivel nacional.

Finalmente en las diferencias por género, son más hombres (con un 78,7%) que las mujeres (74,9%), igual brecha que en el resto del país, donde los hombres están más conectados, principalmente en correos, entretenimientos y transacciones; mientras que las mujeres lideran en redes sociales (87% versus 83,7% de ellos).

Crecimiento

Naciones Unidas declara a Internet como un bien básico. Hoy en día las nuevas tecnologías, con un acceso imprescindible a Internet, son un elemento fundamental para el crecimiento y el desarrollo humano. El acceso a Internet es considerado como una medida de igualdad y equidad en lo que respecto a indicadores sociales.

Fundación País Digital estima que el impacto económico de alcanzar las metas propuestas de un 95% de uso, permitiría que la economía chilena crezca un 1% anual desde ahora al año 2020, explicado solamente por una nueva economía de la información, en donde las TIC cumplen un rol fundamental.

La importancia de la medición continua permitirá conocer el estado actual del desarrollo digital, evaluando en forma periódica su evolución, además de ser una medida de análisis de políticas públicas relacionadas con estas temáticas en la sociedad.