La importancia en detectar lunares cancerígenos
Solamente el 12% de los melanomas son descubiertos en la consulta médica, mientras que entre 55% y 70% son visualizados por los propios pacientes.
Una de las enfermedades a quien todas las personas temen, de una u otra manera, es el cáncer. Si bien hay diversos tipos, algunos mucho más peligrosos y letales que otros, el cáncer de piel poco a poco está desarrollando un mayor número de casos en el país, siendo en zonas más árida como el norte de Chile, donde la radiación solar es mucho más fuerte, existe una mayor factibilidad que se pueda generar la enfermedad.
La Fundación Arturo López Pérez (FALP) de Santiago está desarrollando un programa de difusión de la toma de conciencia del cáncer de piel, enfermedad que según los estudios entre el 55% y 70% es detectada por los mismos pacientes.
Según la información entregada por esta fundación, el melanoma cutáneo (tumores pigmentados) es un cáncer agresivo y puede ser mortal.
Sin embargo, el estudio señala que si éste es detectado en sus etapas iniciales y, por lo tanto, no se ha extendido a órganos internos, el pronóstico del paciente mejora sustancialmente y el peligro es mucho menor.
Para aclarar mayor la información, el doctor Alvaro Pantoja, jefe de Dermatología del Instituto Oncológico FALP, asegura que es fundamental como primer paso "identificar todos los lunares y manchas del cuerpo y auto examinarlos con frecuencia", junto con consultar cualquier tipo de lesión que la persona pueda tener y se distinga de las demás manchas presentes.
Lunar
El facultativo explicó que una lesión pigmentada o lunar sospechoso se manifiesta por su forma asimétrica, coloración abigarrada y bordes mal definidos. El auto examen cutáneo debe incluir, además del tronco y extremidades, las palmas de las manos y plantas de los pies.
El médico recomienda "examinar el cuerpo con atención para detectar cualquier anomalía. Si un lunar tiene las siguientes características debe ser revisado por un especialista de manera inmediata para descartar un posible melanoma".
Lo primero es su asimetría, que una mitad del lunar sea muy distinta a la otra. Como segundo punto hay que tener cuidado con los bordes mal definidos.
Otro aspecto es el color, debe existir preocupación cuando existen dos o más colores y tonalidades.
También el profesional apuntó al diámetro, considerado preocupante si es mayor a los 5 milímetros. Y por último que exista una evolución durante el tiempo. "Un melanoma que se detecta 'in situ', es decir, cuando no ha traspasado de la epidermis a la dermis, tiene mejor pronóstico. No tenemos que esperar a que un lunar se desarrolle internamente y comprometa órganos y sistemas, para acudir a un especialista", agregó.
Zona
Consultado sobre si la gente que vive en el norte está más propensa al cáncer de piel por un tema climático y mayor exposición a los rayos UV, el doctor aseguró que se ven mucho más afectadas "pues tienen más exposición solar todo el año. Muchos además trabajan en mineras, en condiciones de altura, donde la radiación solar es mayor, y por ende la exposición a los rayos UV es también fuerte".
Además sostuvo que "debemos agregar la exposición al arsénico, que es un conocido carcinógeno cutáneo. Todo esto determina que las medidas de protección deben ser maximizadas", finalizó el profesional.