Con el corazón lleno de alegría quedaron los mineros que organizaron una tarde entretenida en un comedor y más aún los niños que fueron agasajados en esta actividad realizada en el sector La Chimba de Antofagasta.
La tarde solidaria fue impulsada por unos sesenta trabajadores del Turno B de la empresa de explosivos Maxam, que prestan servicios en Minera Escondida. Ellos mediante rifas, donaciones de sus colaciones y cooperaciones voluntarias han organizado diversas iniciativas en beneficio de la comunidad.
Esta vez, en su único afán ayudar a los más necesitados, llevaron una tarde de torta, entretención y regalos a los pequeños del comedor "María Acoge" en La Chimba. Ellos, además, disfrutaron de un show infantil y de diversas sorpresas en esta jornada reconfortante tanto para los niños y sus familias, como para sus organizadores.
Fue todo un éxito. Así lo aseguró el gestor de esta iniciativa, Raúl Aracena, quien precisó que "todo resultó excelente y me siento orgulloso del equipo que conformo y de poder realizar estas obras sociales", que partieron a comienzo de año y esperan mantener en el tiempo. Incluso crecer cada vez más y llevarlas hasta otros puntos de la región y también fuera de ella.
Aracena añadió que con estas obras sociales "queremos realizar un cambio en la mentalidad minera, debido a que siempre el minero es mirado como una persona ruda y fuerte... pero también tenemos un corazón que está dispuesto a ayudar a los que más necesitan".
Compromiso social
Así con estas actividades quieren fortalecerse como personas y mostrar el lado más sensible del trabajador minero, como lo han hecho hasta ahora a través de diversas actividades benéficas en el Hogar Don Orione, en el jardín infantil "Trencito de Lulú" y en las visitas al comedor de La Chimba, entre otras.
Los trabajadores del Turno B esperan que esta labor social la puedan replicar los trabajadores de otros turnos, de otras empresas y la ciudadanía en general porque han constatado en terreno las grandes necesidades existentes en la comuna, especialmente entre los niños y los adultos mayores.
Apuestan a un mayor compromiso social, donde la ayuda no sólo pase por entregar donaciones y aportes, sino también en acompañar y darse el tiempo para compartir con otras realidades con mayores carencias.
"Eso es muy reconfortante para los que ayudan y los que reciben la ayuda", acotó.