Redacción - La Estrella de Antofagasta
El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Antofagasta condenó a un joven a la pena de 5 años de presidio efectivo, como autor del delito de conducción de un vehículo motorizado en estado de ebriedad, causando lesiones gravísimas.
Por los hechos, registrados en el Balneario Hornito el 1 de enero del año pasado, Rodrigo Acuña fue sentenciado además a 3 años y un día de presidio por el delito de incumplimiento de la obligación de detener la marcha, prestar ayuda y dar cuenta a la autoridad.
En fallo unánime, el tribunal, integrado por las juezas Marcela Mesías Toro (presidenta), Ingrid Castillo Fuenzalida y Patricia Alvarado Padilla (redactora), le aplicó además la inhabilidad perpetua para conducir vehículos de tracción mecánica, al pago de una multa a beneficio fiscal equivalente a 26 Unidades Tributarias Mensuales (UTM)- poco más de un millón 200 mil pesos- y al comiso del vehículo marca Mitsubishi con el que se cometió el delito. También se le aplicaron las accesorias de inhabilitación absoluta perpetua para derechos políticos y la de inhabilitación absoluta para cargos y oficios públicos mientras dure la condena.
Una vez ejecutoriado el fallo, se procederá a la toma de muestras biológicas para determinar su huella genética e inclusión en el registro nacional de ADN de condenados.
Hechos
El tribunal dio por acreditado que el día de los hechos, cerca de las 11 horas en el sector norte de la Ruta 220, en la zona de estacionamientos del balneario, Acuña condujo en estado de ebriedad su vehículo tipo jeep en dirección al norte y transitó por la vereda y platabanda existente, sin respetar el uso exclusivo de la misma para peatones, siendo increpado verbalmente por algunos de los transeúntes.
Posteriormente regresó en dirección al sur por la calzada y al llegar al sector de playa de estacionamiento nuevamente accedió a la zona de platabanda y vereda, impactando con la parte frontal derecha del móvil a A.N.C.O..
Este fue proyectado hacia el poniente, cayendo al sector de la playa, al igual que D.Z.M, quien producto del golpe cayó en el lugar.
El primero resultó con lesiones gravísimas y, según el fallo, como consecuencia de éstas, "presenta secuelas de carácter permanente o de larga duración" que han determinado su incapacidad para el trabajo y dependencia de terceros para actividades de la vida diaria.
Tras el impacto, el acusado continuó su marcha al sur sin prestar ayuda a las víctimas, ni dar cuenta a la autoridad, siendo fiscalizado posteriormente por Carabineros en el sector del acceso sur del balneario.
La alcoholemia efectuada horas después a Acuña arrojó una dosificación de alcohol en la sangre de 1,60 gramos por mil.