Fabiola Vega Molina
Una segunda etapa comenzó esta semana en la Ley de Etiquetado, que ya lleva dos años en marcha. Esta segunda parte subirá las exigencias ya que se bajarán los estándares de la información nutricional de los productos.
Por ejemplo, una de las nuevas disposiciones de la leyes es que los límites del contenido de energía se redujo de 350 a 300 calorías; el sodio disminuyó de 800 a 500 miligramos; los azúcares totales disminuyen de 22,5 15 gramos y las grasas saturadas de 6 a 5 gramos.
Los cambios en los productos líquidos son casi similares. El contenido de energía disminuye de 100 a 80 calorías: el sodio se mantiene en 100 miligramos; los azúcares totales disminuye de un 6 a 5 gramos y las grasas saturadas también se van a mantener en 3 gramos.
Todo esto provocará que aumenten los productos con los sellos de advertencia.
"Esta segunda parte de la Ley indica una disminución entre un 14% a un 34% de nutrientes que venían en los alimentos", indicó la seremi de Salud, Rossana Díaz.
Además también se iniciarán fiscalizaciones en los supermercados para verificar si están cumpliendo con la normativa y los productos llevan las etiquetas correspondientes.
"Nuestro equipo de fiscalizadores se reparten a través de toda la región y vamos a poder ayudar a la familia a protegerla porque a la familia hay que enseñarle qué es lo que le sirve y los supermercados también están empeñados en lo mismo por lo que nosotros fiscalizamos que ellos lo cumplan", agregó la autoridad de salud.
Díaz además destacó que la personas están más pendientes con los sellos en los alimentos y que tratan de evitarlos al momento de comprar.
"La gente en más de un 90% sí incluye el tema de cuántos sellos tienen los alimentos al momento de comprar, incluso si ustedes les preguntan a los más pequeños llegan a rechazar alimentos que tengan muchos sellos, porque la educación está llegando", manifestó.
Fiscalización
Las fiscalizaciones se realizarán en supermercados y establecimientos educacionales. "Se fiscalizará que el alimento que está etiquetado realmente sea verdad, evitaremos la falsedad. (...) Nuestros fiscalizadores se encargarán que todas las personas estén protegidas y que lo que dice el alimento es lo que realmente tiene", dijo Díaz.
Las empresas que no cumplan con los requerimientos de la ley arriesgan una multa que va desde los 0,1 UTM ($4.700) hasta los 1000 UTM ($46,5 millones).
El año pasado, la seremi de Salud realizó 74 inspecciones en establecimientos educacionales y que resultó con 26 sumarios. Por otro lado, en los supermercados hicieron 50 fiscalizaciones y seis resultaron con sumarios.