Redacción

Dormir junto a los hijos tiene nombre: colecho. Una práctica que puede ser implementada desde el nacimiento hasta una edad indeterminada. Valorada por algunos y desechada por otros. Entre quienes defienden esta modalidad destacan que los bebés alcanzan un sueño más profundo, permanecen más abrigados y que facilita la lactancia materna.

Sin embargo, sus detractores sostienen que existe el riesgo de aplastamiento, de muerte súbita y que no favorece el apego.

Daniela González (31) relató a Emol que es madre de tres niños y que se dedica exclusivamente a su cuidado y bienestar. Uno de siete años, 1 año y una bebé de tres meses. Ella manifiesta dormir con sus hijos y que lo lleva a cabo en la medida en que éstos lo necesiten.

"Lo que te enseñan a ti de chico es que las guaguas tienen que dormir en su cuna y aunque lloren tienen que dormir ahí pero con la práctica me estoy dando cuenta que no es tan así. Con mi hijo mayor después fui aplicando colecho, después le puse nombre cuando me empecé a dar cuenta que estaba en ese tipo de práctica", cuenta.

"Tengo una relación muy cercana con mis hijos. Soy muy cariñosa. Definitivamente el colecho ha hecho que mis hijos sean muy apegados a mí. Mi hijo que tiene siete años es un niño muy seguro, muy feliz, se siente muy querido. Mi hija chica es una niña también feliz, segura, no tiene mayores problemas. Yo creo que la práctica del colecho es beneficiosa para ambos casos y hay que tomarlo como que es algo temporal", añade.

Llorarían menos

Visiones encontradas presenta Hernán Villalón pediatra de la Clínica Las Condes. El especialista considera que dentro de las teóricas ventajas están que la mamá está más disponible a poder atender las necesidades de los niños y que éstos llorarían menos en medio de la noche. Sin embargo, también expresa sus reparos, por lo que no recomienda el colecho en el mismo sitio de los padres sino que apunta a una alternativa intermedia por medio de cunas adheridas a la cama. "Un niño que duerme en la cama con sus padres tiene más probabilidad de que pueda ser aplastado o generarle lesiones o incluso la muerte por asfixia...", indica.

Mientras para la psicóloga infanto juvenil Isabel Puga no hay estudios que indiquen alguna relación a largo plazo del colecho con el concepto de mayor cercanía con los padres. "El concepto de apego seguro tiene que ver con la capacidad de la madre de coordinarse con el hijo, de atender las necesidades, de proteger a su guagua, de contenerla. Entonces dormir con una guagua no da cuenta de que tenga esa capacidad, o sea el colecho puede responder más a necesidades de la madre que a la misma guagua", precisa la también directora nacional del Colegio Psicólogos.

Larysa Switlyk se, una estadounidense que tiene su propio espacio televisivo donde muestra las aventuras de lo que considera un deporte, causó un enorme revuelo con las imágenes que publicó posando junto al animal que mató durante un paseo de caza por la isla de Islay, al sur de Escocia.

"Hermosa cabra salvaje aquí en la isla de Islay, en Escocia", dice su publicación -agregando detalles de cómo le costó matar al animal-. La foto se viralizó e indignó a tal punto que autoridades escocesas señalaron que revisarán la ley de caza local.

Modelo desató la ira y es acusada de racista

"¿Irán está aquí?", se leía en un periódico israelí, junto a la foto de una mujer cuyos ojos azules era lo único que develaba, ya que vestía una prenda musulmana.

La publicidad mantuvo intrigados a los lectores israelíes, hasta que un video mostró de qué se trataba: era un comercial. Por los medios se difundió el spot de la firma de ropa deportiva Hoodies, cuyo rostro es la modelo Bar Rafaeli.

En redes sociales, donde Rafaeli compartió el video, usuarios escribieron: "Respetar la elección de otras mujeres y no ser racista también es básico".

Un nuevo desmayo se registra en un concurso de belleza. Esta vez, Miss Venezuela -Diana Silva- cayó al suelo producto de supuestas complicaciones de salud, mientras participaba en el Miss Earth 2018, en Filipinas.

Hace unos días, Miss Paraguay, Clara Sosa, se desmayó en el escenario, cuando el presentador de Miss Grand Internacional, que se realizaba en Indonesia, la nombró ganadora. En el caso de la venezolana, ocurrido el pasado fin de semana, la participante se encontraba tras bambalinas cuando perdió el conocimiento.

"Han sido los 30 minutos más difíciles que hemos tenido", aseguró Prince Julio César, presidente del Miss Earth Venezuela, a Globovisión, donde se transmitía el certamen.

"Los médicos le hicieron prueba de glicemia, le midieron la tensión. En la mañana sí la noté extraña, le dijo a los médicos que había vomitado en la mañana pero se había recompuesto [...] Tuvieron que colocarle oxígeno y hacerle pruebas de glicemia. No sabemos cómo manejarlo. Ya por lo menos está estable y ya está hablando".