Chilenos apresados en Malasia dejan la cárcel tras 15 meses
Fernando Candia y Felipe Osiadacz quedaron en libertad, mientras el tribunal ve la apelación de la fiscalía.
Michael Seguel P.
Después de 15 meses reclusión, la mayor parte del tiempo en la cárcel de Kuala Lumpur, en Malasia, el ingeniero comercial Felipe Osiadacz (27) y el chef Fernando Candia (30) quedaron ayer en libertad. Los chilenos dejaron la cárcel luego de que el 15 de noviembre un tribunal local los condenara a 24 meses de prisión, por el homicidio culposo de un trabajador sexual.
La sentencia se produjo tras un acuerdo entre su defensa y la fiscalía, que inicialmente pedía la pena de muerte en la horca.
A la pena se descontaron los meses que estuvieron en la cárcel desde agosto del año pasado. Sin embargo, la fiscalía apeló luego a la sentencia, lo que mantendrá a los imputados en Malasia en este proceso.
Ayer, y tras resolver trámites migratorios pendientes, los chilenos abandonaron el Centro de Detención para Inmigrantes y tras dirigirse al centro de migraciones de la ciudad, fueron visto por la prensa que esperaba por ellos.
Los fueron a buscar Maritza Olcay, la madre de Candia, y Gaelle, la polola belga de Felipe. Las dos mujeres han permanecido juntas en el proceso judicial en Kuala Lumpur.
Consultados por cómo se encontraban, sólo se escuchó un escueto "bien" de Osiadacz, quien vestía un jockey negro y un polerón morado. Candia lucía un polera blanca.
Ambos abordaron una van con patente diplomática española. Mientras en la parte trasera se subieron Candia, Osiadacz y su polola, adelante se sentó la madre de Candia. Luego salieron del lugar saltándose la luz roja de un semáforos, dijo La Segunda.
Los pasaportes de los chilenos serán devueltos a un juez del tribunal, según lo solicitado por la fiscalía, para evitar una eventual fuga, consignó Canal 13.
En Chile, el canciller Roberto Ampuero dijo ayer que "es una buena noticia que los dos compatriotas chilenos en Malasia puedan enfrentar en libertad la etapa que resta". Añadió que "sabemos que el proceso aún continúa, que las situaciones y decisiones del tribunal pueden ir variando".
15 meses de prisión es el tiempo que los chilenos estuvieron recluidos en Kuala Lumpur.
2 años de cárcel es la condena que dictó el tribunal de primera instancia contra los chilenos.