Cartas
Derechos
Señor director:
Soy venezolano radicado en Chile y padre soltero de una niña de 3 años, chilena, de la cual tengo su custodia. El miércoles recién pasado cuando me dirigía a los baños del Líder del Antofagasta Shopping para atender la necesidad de mi hija, la cual tenía que desnudar y cambiar en el baño de mujeres, las mujeres presentes en el baño me entendieron y no se incomodaron, pero el guardia de turno no razonaba que tenía una niña desnuda en un cubículo y que la tenía que cambiar. Empezó a tratar de sacarme y le dije: "Por favor, entienda, no voy a llevar a mi hija desnuda a un baño de hombres". El guardia entró y se paró detrás mío frente al cubículo que tenía abierto con mi hija. Yo me indigné y le dije: "Por favor, retírese, tengo a mi hija desnuda". Él no aceptó y me decía salga y vaya al otro baño. Yo le repetía: "No voy a sacar a mi hija y usted, por favor, retírese, no tiene por qué estar mirando a mi hija desnuda, respete".
Como él no hizo caso, entonces me atravesé y empecé a cubrir a mi hija con mi cuerpo para que él no la siguiera mirando. Él insistía en quedarse mirando. Al ver esto las mujeres allí presentes, alzaron su voz contra el guardia para que se retirara y entendiera que yo tenía una niña, que era su papá y era lógico que debía cambiarla en el baño de mujeres, a lo que respondió que llamaría a Carabineros para sacarme a la mala. Así que las mujeres le empezaron a gritar, presionando al guardia para que él saliera del baño.
Luego llegó el jefe de los guardias, quien tomó la misma actitud, por lo que las mujeres se pararon en la puerta y le pidieron a este jefe que pararan y que me dejaran cambiar a mi hija. El jefe seguía en su posición, al igual que el guardia, de sacarme del baño. Mi hija asustada me preguntaba qué pasaba.
Al llegar Carabineros, ellos me dieron la razón y me dijeron que hiciera la denuncia escrita, pues aquí violaron mis derechos como padre, con custodia en mano, y los de mi hija al querer sacarla del baño, y peor aún, el guardia mirándola desnuda. Y aunque se le repitió la falta que él cometía dentro de un baño de mujeres, él continuó de manera grosera.
Fui a la administración del Shopping, exigiendo que se tomaran medidas ante la actitud del guardia y la respuesta fue: "Tomar alguna acción pasaría en otros países, pero no en Chile y que ellos no podían hacer nada con el guarida".
Frente a esto yo le dije que la actitud del guardia fue desubicada y pasó por encima los derechos de mi hija, pero al administrador le dio igual, me dijo que pusiera la queja, pero que él no podía hacer nada.
Ojalá se publique esto, para que estas cosas no le vuelvan a ocurrir a ningún padre soltero o niña chilena.
José Manuel Hernández