Ignacio Araya C.
Hay que googlearlo y leer titulares con su nombre para darse cuenta de lo importante que es: "Perro Aragón detectó 19 paquetes de clorhidrato de cocaína"… "Perro Aragon detectó droga en un bus de ola región de Antofagasta"… "Aragon, el perro que detectó 100 kilos de droga en la región". Y así siguen varios.
Tras casi tres años de servicio acompañando al OS7 de Carabineros en la región de Antofagasta, el nombre de Aragon, el perro policía, apareció hace poco en una licitación pública, lejos de los titulares de prensa. La razón de dicha licitación publicada en Mercado Público: "La necesidad de contratar el servicio de flete aéreo nacional, en el tramo Antofagasta-Santiago, para el traslado del can fiscal Aragón del Emblema Verde y jaula, con motivo de traslado del can a la Escuela de Adiestramiento Canino".
Aragon se va. Este Golden Retriever dejará por un tiempo de olfatear drogas, debido a que su guía, el cabo 1º Adrián Pérez, se va a la Escuela de Suboficiales a seguir su carrera profesional. El capitán Eugenio Olea, jefe de sección (s) del OS7 Antofagasta, dice que lo van a echar de menos. "Fueron muchos los procedimientos que realizamos con él. Nos aportó con su adiestramiento, era un buen perro", dice, agregando que en estos tres años de pega "nos dio hartos dividendos auspiciosos, sobre todo en las incautaciones de droga".
El olfato del perro fue vital para captar dónde estaban metidos los narcóticos. Desde los seis meses de edad, fue entrenado para detectar marihuana, clorhidrato de cocaína y pasta base. Dio buenos golpes, como cuando pilló 19 mil dosis de coca que estaban en paquetes recubiertos con grasa para disimular el olor, el año pasado. Aragon, con su increíble sentido del olfato, husmeó por aquí y por allá y los encontró igual.
Aragon iba a todos lados en su búsqueda incansable para frenar el tráfico de estupefacientes. En un control carretero en medio del desierto, en 2017, el perro marcó las maletas que traían dos pasajeras que iban desde Calama hacia Santiago. Después de eso, la gente del OS7 revisó y claro, dentro habían 11 paquetes de pasta base.
Pero seguirá
"Para nosotros, en el trabajo en drogas, los canes fiscales son un gran apoyo", cuenta el capitán Olea. "En los allanamientos que realizamos, la instrucción del perro es fundamental", explica, recordando la buena labor en lugares como, por ejemplo, la garita de control en La Negra. En ese punto estratégico, ubicado por la ruta Panamericana, el perro Aragon tuvo varios procedimientos exitosos.
Sin embargo, aunque Aragon cambie el sol y los paisajes desérticos de Antofagasta por la agitada vida citadina de Santiago, seguirá trabajando en la detección de drogas. Digamos que, por ahora, está con descanso. Ahora falta que se asignen los pasajes, el flete para todo el complejo proceso del traslado, y tendrá que despedirse de las tierras del norte. "Ahí va a ser asignado a un nuevo guía, el cual también tiene un proceso de inducción para conocerlo y que lo adiestre un tiempo, y de ahí a una nueva destinación", señala el capitán del OS7.
La unidad especializada de Carabineros se queda poco tiempo sin ladridos. Por estos días llega Emy del Emblema Verde, una hembra de raza Labrador Retriever (ver recuadro) que tendrá la difícil misión de seguir el destacado legado antidrogas de Aragon, el perro policía.