Cartas
Alimentos y cáncer
El cáncer es una de las primeras causas de muerte a nivel mundial y un 30% de las muertes por esta enfermedad se deben a factores de riesgo de hábitos alimentarios.
Existen alimentos que, según su consumo, por sí solos o mezclados podrían producir cáncer. Los alimentos amiláceos son los que generan acrilamida en alimentos derivados del almidón, esto es a través de un aminoácido llamado asparagina y en presencia de algunos azúcares y altas temperaturas, produce la reacción de maillard o dorado de los alimentos. Entre estos están: papas fritas caseras, chips de papas, cereales, pan tostado, hallullas y marraqueta muy dorados, palomitas, berlines, galletas infantiles y crackers, empanadas horneadas y fritas, sopaipillas y calzones rotos.
Se debe tener precaución con las carnes procesadas y derivados como cecinas y embutidos; y con los métodos de cocción a alta temperatura, ya que generan compuestos que pueden contribuir al riesgo cancerígeno, cocinar a altas temperaturas en contacto directo con una llama o una superficie caliente, como la parrilla o el sartén, produce más de ciertos tipos de químicos cancerígenos como los hidrocarburos aromáticos poli cíclicos y las aminas aromáticas heterocíclica.