Ignacio Araya
Fue el 8 de febrero del año pasado que el Presidente Sebastián Piñera decretó la zona de catástrofe en la Provincia de El Loa. Hacía mucho tiempo que no llovía tanto y el paso del agua hizo estragos. A fines de ese mes, cuando la cosa se estaba calmando, ya se tenía una cifra de lo catastrado para poder reconstruir las viviendas en las que hubo daño.
De acuerdo a esas cifras, el 72% tenía daños leves y, dependiendo del caso, se les dio una "tarjeta de banco de materiales" para que los damnificados compraran materiales para reparar los daños, con montos entre 30 a 50 unidades de fomento (UF).
A un año de lo ocurrido, el balance del seremi de Vivienda, Julio Santander, es positivo. Dice que los equipos se desplegaron en tiempo récord en la zona y a los 15 días ya se estaban entregando beneficios. El universo de familias beneficiadas fue de 145, y hasta ahora se ha cubierto al 70% de ellos, quienes canjearon sus tarjetas, retiraron los materiales y los pusieron en obra para ejecutar las mejoras.
Para llegar a esa cifra, funcionarios han fiscalizado que todo ande en orden y que las gift card se gastaron efectivamente en materiales de construcción. Sobre el 50% ya ha sido fiscalizado. "Vamos un poquito atrasados, pero sí vamos en términos positivos, que hasta el minuto no hemos detectado ningún caso de una persona que haya hecho un mal uso de la tarjeta", señala Santander.
El tema, es que es complejo fiscalizar uno por uno, dice el seremi. "Pero hay que hacerlo, y ahí hay un trabajo asociativo con la Dideco municipal para poder tener un dato en tiempo real", agrega la autoridad regional.
Por otro lado, el director de Seguridad de la municipalidad de Calama, Isaac Vásquez, cuenta que en el catastro que ellos han realizado en el Alto Loa, se ha constatado que hay gente que no ocupó los materiales, o que no tienen la mano de obra suficiente para construir. Esto, ya que pueden entregar materiales de construcción, pero por ley no están facultados a edificar a un privado.
"La característica en común que encontramos en muchos domicilios, fue que hay domicilios que todavía tienen los materiales que les entregamos ahí guardados desde el año pasado", dice el funcionario municipal.
Más preparados
El seremi de Vivienda cuenta que, a partir de la experiencia de lo que ha ocurrido, el ministerio está preparado para nuevas eventualidades. "Es muy distinto cuando visualizas, por ejemplo, en Google Earth, a que después mandas a un profesional a terreno y la realidad de terreno te dicta otra cosa, entonces es ahí donde precisamente hemos avanzado", dice. El profesional que se envía, cuenta Santander, se envía con respaldo georreferencial y condiciones de seguridad.
"Una de las grandes lecciones positivas que dejó la emergencia, es que nosotros a los quince días ya estábamos entregando las primeras ayudas y eso es tremendamente positivo en un país que siempre está expuesto", concluyó la autoridad regional de Vivienda.
70% de las casas afectadas en 2019 tuvo la cobertura del Gobierno ante los daños ocurridos.