Dejar a los países pobres sin vacunas perjudicaría a los ricos
Informe de la ONU estudió el efecto de los cuidados contra el covid en las economías del mundo.
C. Infanta / EFE
Dejar a los países pobres sin vacunas contra el covid-19 causará graves daños no solo a sus economías, sino también a las economías más avanzadas del planeta, y terminaría siendo más costoso que financiar el sistema creado para dotar a los primeros de las herramientas para acabar con la pandemia.
Si se permite que la pandemia quede latente entre la mayoría de la población mundial y que tenga una larga duración, las consecuencias económicas a nivel mundial serán deplorables, aseguró ayer la Organización Mundial de la Salud (OMS), basándose en los resultados de un estudio económico sobre la crisis sanitaria.
El análisis, que fue encargado por la Fundación Bill y Melinda Gates, se centra en diez países incluyendo varios que representan las economías más importante del mundo.
Sostiene que este grupo de países tendría beneficios económicos equivalentes a 153.000 millones de dólares el próximo año si hay un acceso global a las vacuna contra el covid-19.
La estimación de ese beneficio para los cinco próximos años se eleva a 466.000 millones de dólares, es decir doce veces más que el coste total de la plataforma ACT Accelerator, creada por la OMS en colaboración con entidades público-privadas para garantizar que los países de menores recursos reciban una parte justa de test de diagnóstico, tratamientos y vacunas.
Esta iniciativa ha recaudado cerca de 10.000 millones de dólares, pero tiene un déficit de 28.200 millones.
La OMS dijo ayer en un comunicado que se necesitan 4.300 millones de manera urgente para que no se produzca un retraso en dar acceso a los países más pobres a las herramientas que necesitan para hacer frente al virus.
Por el momento, los diez países ricos analizados para este estudio (Canadá, Francia, Alemania, Japón, Catar, Corea del Sur, Suecia, los Emiratos Árabes Unidos, el Reino Unido y Estados Unidos) han contribuido en conjunto con 2.400 millones de dólares al ACT Accelerator.
El más generoso es el Reino Unido, que ha comprometido cerca de 1.000 millones de dólares, y el más indiferente EE.UU..
"Si se permite que la pandemia quede latente entre la mayoría de la población mundial y que tenga una larga duración, las consecuencias económicas serán deplorables.
Organización Mundial de la Salud.