Ricardo Muñoz Espinoza

La tarde del domingo fue la antesala de lo que ayer se confirmaría. En aquella oportunidad se informó que en la región el número de pacientes internados a causa del SARS-Cov-2 sobrepasó la centena, algo que no ocurría hace tres meses.

Y ayer el Hospital Regional de Antofagasta (HRA) confirmó lo altamente complejo de esta situación que afecta, principalmente, a la "Perla del Norte": la totalidad, las 75 camas de las que dispone el recinto médico en la Unidad de Pacientes Críticos (UPC) se encuentran ocupadas.

Si ya había una alta ocupación de personas a causa de otras enfermedades y cirugías que habían quedado pendientes a mediados de año por la pandemia, el aumento de contagios Covid agudizó la situación hasta el punto que durante la noche del domingo se debieron trasladar a cinco pacientes a la Región Metropolitana para mitigar esta congestión.

El director del HRA, Enrique Bastías, comentó que la estrategia se basa en el traslado de pacientes, ya que si bien en el peak de la pandemia en junio-julio el recinto médico pudo abrir hasta 105 camas para ello se necesita de personal de salud necesario, el que ahora se encuentra agotado después de los días más complejos.

De hecho, de acuerdo a las estimaciones del Minsal, el 25% de la dotación de los hospitales tuvieron una alta demanda hacia mediados de año se encuentra con licencia y descansos a causa de la sobrecarga.

"En la actualidad, tenemos un total de 75 camas críticas y ello implica que, por el volumen de contagio que estamos viendo, necesitaremos ampliar nuevamente esta capacidad, pero para eso se requiere no solo un amplio esfuerzo de dotación de equipos y tecnología, sino también de personal profesional capacitado y allí es donde se deben enfocar los mayores esfuerzos porque el personal de salud está cansado, muchos están con licencias, otros con vacaciones por excesivo agotamiento, y se necesita tener al personal de salud descansado física y mentalmente para poder enfrentar esta nueva ola de casos positivos de covid-19", señaló Bastías.

A eso se suma lo complejo que resulta la contratación o la reincorporación de personal para rehabilitar más camas y así tener una dotación que permita cubrir los turnos de quienes hoy se encuentran con descanso o licencia.

La seremi de Salud, Rossana Díaz, explicó que "si nosotros queremos aperturar más camas estamos hablando de aperturar camas UCI o UTI y por lo tanto, el personal que se pueda contratar no es nadie que sea recién egresado. Tiene que ser personal con una capacidad diferente y con mayores estudios, con preparación en pacientes críticos y ese es el problema. Ese es el personal que es difícil de conseguir porque se lo pelean de todas las regiones y hay regiones que están mucho más mal que la nuestra".

Sin embargo, Díaz reiteró que el país funciona como una gran red asistencial única y por lo tanto, eso permite convocar profesionales de otras regiones, tal como ocurrió en julio pasado cuando un equipo del Hospital de Magallanes reforzó la atención en el Carlos Cisternas de Calama.

Cifras de ocupación

Y respecto a dicha ciudad, si bien la situación es distinta a la que se vive en Antofagasta, dado que los contagios en esa comuna no tienen un aumento tan explosivo en comparación a la capital regional, de igual forma causa inquietud.

En la capital loína la ocupación durante la tarde de ayer era de un 80%, lo que incluye un 90% en el H. Carlos Cisternas y mayor desocupación en el Hospital El Cobre. Aun así, contando ambos recintos, hasta ayer el total de camas UCI era de 20. Nuevamente, en su mayoría están siendo utilizadas por pacientes de otras enfermedades.

Por lo tanto, hasta ayer se contaban 106 hospitalizados Covid en la red de salud regional (nuevo récord desde el peak de la pandemia; 89 de Antofagasta, 10 en Calama, cuatro en Tocopilla, dos en Mejillones y uno en Taltal). Con ello, la ocupación de todas las camas en la región, sumando pacientes Covid y no Covid llegó al 91,8%.

Además, los pacientes en UCI por Covid-19 subieron de 17 el 4 de diciembre a 45 hasta ayer. Es decir, un alza de un 164,7%. De estas 45 personas en unidades críticas, 35 permanecían en ventilación mecánica, 32 de ellas de Antofagasta.

Este aumento también va en línea con el incremento de casos activos (contagiantes) en la región: estos pasaron en sólo un mes de 161 (Informe Epidemiológico) a 719 (cifra entregada ayer por la S. de Salud), un alza de 346,5%. Además, entre diciembre y lo que llevamos de enero, Antofagasta pasó de 104 a 511 y Calama de 21 a 48 casos activos.

A inicios de diciembre el ministro de Salud, Enrique Paris, proyectó que en enero comenzaría una eventual segunda ola de contagios y ayer la seremi de Salud por primera vez reconoció que es algo que ya se está viviendo. "Yo diría que la segunda ola, usted la tiene ya, porque se están viendo los números. El aumento del 53% como decía el seremi de Gobierno, Marco Vivanco, nos muestra que estamos en una segunda ola, que no es menor el problema. Estamos teniendo un incremento muy rápido de los números y por lo tanto, la posibilidad de volver a etapa 1 también existe... Mientras más nos cuidemos menos vamos a ir al hospital y más vamos a poder seguir atendiendo a la gente (de otras enfermedades) que quedó postergada ", señaló en el balance regional la seremi Rossana Díaz.