Pacientes recuperados de Covid luchan contra las secuelas
En el Hospital Clínico de la UA trabajan en terapias para superar el llamado "Covid Prolongado", el cual después de superada la enfermedad puede causar fatiga, depresión y otros trastornos.
Ricardo Muñoz E./Redacción - La Estrella
Fernando Arcila Castillo, de 72 años, dice que en mayo pasado comenzó a sentir malestar general: "Me levanté y me subí solo al auto para ir al hospital, no tuve complicaciones para manejar, pero cuando llegué me intubaron de inmediato".
Después de ese episodio estuvo dos meses conectado a un ventilador mecánico en posición boca abajo (prono), luchando contra la cara más temible de la enfermedad Covid-19 y debido a la escasez de camas críticas fue derivado desde el Hospital de Salamanca al de Coquimbo.
Pero Fernando se sobrepuso a la adversidad y a ese escenario tan crítico. Así hace menos de un mes recibió el alta y se trasladó hasta Antofagasta para estar con su hija a recuperarse de las secuelas del coronavirus, entre ellas la dificultad para desplazarse.
Es por eso que continúa su terapia en el Hospital Clínico de la Universidad de Antofagasta (UA), donde trabaja junto al equipo de profesionales para recuperar su calidad de vida previa a la enfermedad.
"Por el Covid-19 perdí coordinación, fuerza y estabilidad en casi todo el cuerpo, me cuesta caminar solo y hacer algunos movimientos con el brazo. Pero llevo cuatro sesiones con este equipo maravilloso del Hospital Clínico y ya he tenido cambios importantes, por ejemplo, ahora puedo pararme de la silla sin la ayuda de nadie", señala.
Lo que vivió Fernando se conoce como el Síndrome del Covid Prolongado, una condición que es más frecuente en quienes requirieron hospitalización, personas que meses después de haberse recuperado resultaron con secuelas o con síntomas que persisten como dolor abdominal, fatiga, dolor generalizado, fatiga o ansiedad y depresión.
Un estudio reciente a cargo de la Universidad de Oxford, el Centro de Investigación Biomédica de esa institución y el Instituto Nacional de Investigación del Reino Unido, determinó que uno de cada tres pacientes Covid-19 tendrá los síntomas prologandos de la enfermedad entre los tres y seis meses posteriores.
No obstante, estas dolencias pueden ser superadas a través de la terapia. Así lo comenta el kinesiólogo encargado del área de neurorehabilitación del programa de Rehabilitación Post Covid-19 del Hospital Clínico de la UA Andrés Ardiles Vera, quien dice que "nuestra principal tarea es trabajar en los trastornos asociados del déficit del control motor del paciente, básicamente el equilibrio dinámico y estático, además de la marcha independiente. Fernando llegó muy inestable y a pesar del poco tiempo que llevamos, notamos un gran avance".
Leandro Müller es otro de los usuarios que están en recuperación. El joven de 37 años, montañista y amante de los deportes extremos, acostumbrado a viajar por temas de negocios, estuvo 60 días en la cama de su hogar con recaídas, malestares gástricos y alta temperatura tras contagiarse con SARS-CoV-2. Y aunque superó el virus, las secuelas se han hecho sentir: 10 kilos menos, pérdida del tono muscular y una inflamación pulmonar en tratamiento. "Lo más complicado son los dolores y el cansancio que uno experimenta", señala.
Leandro había viajado en mayo del año pasado a Santiago por temas laborales. Un día comenzó a notar la pérdida de su olfato, era el primer síntoma de contagio por Covid-19. Posteriormente, vivió los demás malestares en su casa, ya que afirma que "me acerqué dos veces al hospital para que me hospitalizaran, pero no pude ingresar porque la prioridad era la población adulto mayor".
La enfermedad además tuvo efectos en su salud mental y Müller cayó en una depresión que hasta el día de hoy lo afecta. "Todo lo que ocurre te deprime, porque uno deja de hacer cosas habituales por el cansancio y las molestias. Yo soy trabajador independiente y lo que hago diariamente es lo que percibo y eso afecta psicológicamente", reflexiona.
Hoy el joven lucha contra en el recinto médico contra la secuela de una inflamación de un alveólo pulmonar, la zona en donde se produce el intercambio de oxígeno con el dióxido de carbono durante la respiración.
"Ahora estoy en tratamiento por la inflamación, además tengo ácido úrico, dolor de huesos. Y antes me resfriaba tres veces por semana, caminaba una cuadra y me cansaba de inmediato. Mi vida ya no será la misma", profundiza.
"Él tenía bastantes secuelas pulmonares. En la primera semana duraba ocho minutos en la bicicleta, pero después de tres semanas está realizando 30 minutos de ejercicio con alta intensidad; además, cumple con su pauta para el hogar y ha aumentado su fuerza muscular. Sin embargo, lo más importante es la continuidad y frecuencia de las terapias para tener resultados definitivos", comenta, en tanto, la directora del programa, Valeria Páez, quien agrega que los pacientes que continúan con su proceso de rehabilitación en el Hospital Clínico de la UA han mostrado frecuentemente padecer depresión, trastorno de la memoria, debilidad y problemas de movilidad.
Este programa está dirigido a mayores de 18 años que debieron ser hospitalizados por el Covid-19, los interesados se pueden contactar a través de las redes sociales del hospital universitario y al teléfono 55 2719091.
"Lo más importante es la continuidad y la frecuencia de las terapias para tener resultados positivos"
Valeria Pérez, directora del programa de Rehabilitación Post Covid del Hospital Clínico de la UA