Leo Riquelme

Pasadas las diez de la mañana de ayer la ministra del Interior Izkia Siches se dirigió junto a su comitiva a la comunidad de Temucuicui, en la comuna de Ercilla, a reunirse con Marcelo Catrillanca, padre del comunero Camilo Catrillanca, muerto en noviembre de 2018 por un tiro policial.

La actividad era una de las primeras del día de la jefa de gabinete que, acompañada de otros cinco ministros, llegó en la noche del lunes a Temuco como parte de la política de apertura al diálogo que quiere tener el nuevo Gobierno en la Macrozona Sur para enfrentar la violencia rural. En este caso, dijo la autoridad, su finalidad era encontrarse con una víctima, tal como hizo antes con un matrimonio de agricultores que sufrió la quema de su casa en un atentado.

La furgoneta que la llevaba iba por el camino Quecherehuas cuando se empezaron a oír disparos al aire, por lo que los encargados de seguridad ordenaron el retorno hacia el retén de Ercilla.

"Yo lo único que identifiqué fue el choque de nuestro vehículo cuando intentó retroceder", dijo Siches.

Un video del hecho muestra que hubo al menos diez tiros, algunos en ráfaga. También se ve el humo de una barricada y una camioneta roja con varias personas que dilataron el regreso, una de las cuales portaba una bandera mapuche. Además, un equipo de prensa del grupo denunció que recibieron piedrazos. Un testigo agregó que los tiros se extendieron por cerca de "cinco a diez minutos".

El fiscal César Schibar precisó que el grupo ni siquiera alcanzó a ingresar a la comunidad porque la vía estaba cortada por un automóvil incendiado. Junto a él se encontró un panfleto en que se mencionaba una "resistencia mapuche" y que "no habría diálogo" con las autoridades.

El fiscal agregó que junto al delito de incendio se investigarán ilícitos como disparos injustificados y atentado en contra de la autoridad.

La comitiva no viajaba con el resguardo de vehículos blindados, que es como se estila en estos casos. En Ercilla, Siches permaneció por casi una hora en el retén hasta que pasadas las 11.00 horas llegó Marcelo Catrillanca.

"La visita fue muy improvisada. No podemos decir nosotros que esto se hizo con tiempo", dijo al ingresar, sosteniendo que recién el lunes supo del encuentro, que finalmente pudo realizarse en el municipio. Antes, reconoció "las buenas intenciones del Gobierno", pero admitió que existe "desconfianza" con las autoridades "porque siempre nos han mentido".

Siches respondió que la reunión se planificó antes del cambio de mando y que fueron los Catrillanca quienes pidieron que se hiciera en Temucuicui. "Sabíamos que podía haber algún riesgo", admitió, a lo que luego agregó que tendrán que "analizar sus protocolos" de seguridad. No obstante, defendió la decisión de permanecer en el territorio en esas condiciones.

Seguridad y militares

El dispositivo fue criticado. Por ejemplo, el diputado RN Miguel Mellado recordó que en enero de 2021 comuneros armados impidieron el ingreso de 850 funcionarios de la PDI en un operativo antidrogas. "Temucuicui es otro Chile, no dejan entrar a nadie que ellos no quieran", dijo.

Al cuestionamiento se plegó la PC Karol Cariola: "No hay que pecar de confiados, acá hubo evidentemente situaciones que no se previeron. Poner en riesgo a un equipo ministerial por parte del Gobierno es una situación bastante compleja".

El PS Leonardo Soto coincidió en estimar que el "dispositivo no tomó todas las medidas necesarias"; mientras que para el gobernador Luciano Rivas (Evópoli) lo sucedido fue una muestra de "lo que está ocurriendo en esa zona (...) donde hay territorios donde ni siquiera la ministra del Interior puede llegar de forma normal".

Para el alcalde Valentín Vidal, se trató sólo "de un accidente más", que se originó por "parte de grupos que están dando a conocer su malestar" porque la reunión era sólo con Catrillanca y no con toda la comunidad.

"Cada vez que nosotros llegamos a una comunidad mapuche siempre tenemos que pedir permiso", agregó.

El hecho llevó al PS Leonardo Soto a expresarle al Gobierno que su bancada está disponible para extender de manera "transitoria" el estado de excepción, que vence el 26. Para el diputado, en la salida de los militares y el traspaso exclusivo a manos policiales "no se puede improvisar".

La idea fue descartada por el Ejecutivo. "Esto sucedió en estado de excepción", recordó la vocera Camila Vallejo. "Nosotros vamos a terminar con él porque queremos abrir un espacio de diálogo para lograr la paz (...) Para ello la solución no es la guerra".

La ministra Siches aseguró que no pretenden "arrancar" y advirtió mantendrán su política de despliegue conversando con todas las partes para elaborar un plan integral. De hecho, aseguró que la próxima semana acudirá a la zona el subsecretario Manuel Monsalve y en las siguientes lo hará ella misma.

La jefa de gabinete anunció que crearán una comisión de verdad, justicia y reparación" para todas las víctimas; comprometió que habrá "más Estado" y diálogo con todos actores que quieren paz para buscar soluciones conjuntas a los problemas que aquejan a la región,

"Los que crean que la violencia es la solución, están equivocados", dijo. "A los grupos organizados que están en torno a la violencia, al robo de madera y que no dejan a los vecinos en paz, nosotros los vamos a perseguir con todo el imperio de la ley", agregó.